viaje...

venden pastillas para no soñar??...sería adictas a ellas, creo que es un sueño lo que me trajo hasta acá, y lo que hoy hace que me siente frente a mi maquina a escribir esto...soy paraguaya, tengo 27 años la segunda de mi familia, y "una chica de familia" como diría mi papá… viví, crecí, amé, sufrí, lloré, corrí, salté, canté, reí, bailé, probé, me tropecé, me levanté, amanecí, vi los mejores atardeceres, estrellas fugases, conocí y sobre todas las cosas soñé en Asunción, ciudad de naranjos y flores, de tierra húmeda, de tarde calurosas, de domingos silenciosos, siestas aburridas y noches muy divertidas…este año empecé de una manera diferente con pensamientos diferentes y sueños diferentes, personas, circunstancias, hechos, encuentros, desencuentros, procesos, amores y desamores hicieron que mis ganas de conocer otro cielo y otra tierra florezcan y de nuevo encuentros y desencuentros, que ahora agradezco, hicieron que termine en El Calafate… tengo que contar desde el principio de mis miedos para que vayan entendiendo o tratar de entenderme lo que siento. Desde los 12 años que no viajaba en avión, hice 2 viajes sola sin mi familia, a bs as unas vacaciones de invierno con mi prima, y un verano en Florianópolis con amigos, las dos experiencias fueron muy divertidas y experimentales, pero fueron vacaciones, ahora mi historia era diferente, ahora: me iba de mi casa, de mi país y a vivir en pareja, con alguien que conocí 3 semanas, pero bueno…decidí soñar… La idea era llegar de sorpresa un día antes, tenía un taxista que me esperaba en Ezeiza y me llevaba hasta aeroparque…al salir de asunción con 3 maletas mas mi mochila, por que todo bien con lo natural y la mochileada, pero me venía al sur y necesitaba de mis “cosas”…en fin!, al subirme al avión, con una compañía que no lo esperaba, mas mi miedo, mas mis sueños, mas las ilusiones puestas eran mucha carga para mí, pero respire profundo, conté hasta 100 y despegué…el vuelo al final no era nada con todo lo que tenía adentro así que me subi el volumen de mi música y dormi, hasta pude dormir!. Llegue a bs.as! Rodolfo (el taxista amigo), me estaba esperando con un cartel con mi nombre, Rodolfo lo máximo, divino, me contaba la historia de algunas construcciones, barrios, plazas y lugares que me daban la bienvenida a mi nueva vida, fue fantástico para mí empezar por bs.as, no conozco mucho, ni tampoco muchas ciudades, pero es mi ciudad favorita sin duda alguna, dentro de Sudamérica, es mi pequeña Europa que tanto anhelo conocer. Rodolfo me dejo en el centro para que de unas vueltas mientras hacía hora para tomar mi próximo vuelo que salía a las 4 de la tarde, mis maletas quedaron en el hostel (el mismo que trabaja fede acá) y me calcé la mochila que era más que mi peso corporal y salí a caminar por las calles porteñas, llovía y hacía frío el clima me empezó a poner a prueba después de caminar 2 horas, y de comer en el primer Mac Donals que encontré (que paraguay!) volví al hostel a esperarle a Rodolfo. Fuimos a Aeroparque, baje mis 3 maletas, y haciendo el check in me dice la desagradable chica del mostrador que mi pasaje era para Trelew…que queee????, jaja no señorita mi pasaje es a El Calafate!, estoy llegando de SOR PRE SA!, mirá tu pasaje dice Trelew. Después de hablar con la inoperante de la agencia de Paraguay y que me confirmó que sacaron mi pasaje mal, me senté a llorar y a esperarle a Rodolfo de nuevo. Por lo menos tuve una noche más en bs.as. Al día siguiente el cielo estaba hermoso, por fin con pasaje correcto en mano embarque a mi destino final (por ahora), esta vez ya pedí ventanilla, el viaje buenísimo, mirar como la tierra va cambiando de texturas y estar en el cielo es lo mas maravilloso que hay. Pero tengo que quejarme de la atención de Aerolíneas Argentinas, 2 sanguchitos de porquería, con el vare á que tenía!!!, en fín el avión aterrizó y se abren las puertas directamente en la pista, al salir del avión me quedé congelada por lo menos 3 minutos, hasta que una señora porteña, rubia teñida me dijo: correte nena!...el viento me cortaba la cara, las montañas estaban todas alrededor, el cielo despejado y un frío de cagarse, al entrar al aeropuerto estaba toda la gente del vuelo anterior buscando sus maletas, y yo tenía que buscar las 3 mías y pelearme con curepas!... En fin, llegué!, conocí mi casita, que son unos duplex y atrás nos cuida una montaña gigante!, según Fede montaña 1, por que yo pregunte si tenían nombre tipo cerro tití, cerro Lambaré…y su respuesta fue: montaña 1 montaña 2…la impresión desde el primer momento que llegas es que todo pasa muy lento, no hay ruido, hay paz, hay tranquilidad, hay amor, hay buena energía hay gente linda buscando lo mismo que busco yo, y por eso nos encontramos todos acá…paz! Conocí personajes extraños si los hay, cada uno en su vida, como en cualquier lugar donde vas de turista, pero como no soy turista por que la idea es quedarme un tiempo o lo que decidan mis sueños, pero tampoco soy local, estoy en un lugar que pareciera “fuera de contexto”, pero disfruto de cada segundo que pasa, el lugar te enamora sin duda, salir a caminar y ver esas montañas, las casas, el pueblo, la gente los perros, que muchos perros!!!, por todos lados, quisiera darle un espacio importante a esto! HAY MUCHOS PERROS!, la gente sale de su casa para trabajar y su perro sale con ellos, entonces “en la calle están los perros”, la otra vez baje al pueblo y me siguieron como 6 de los perros…jaja que divertido! Tengo que decir que no estoy acostumbrada a caminar mucho, en asunción me acompañaba “elputycar” a todos lados, pero también tengo que decir que nunca disfrute tanto de caminar, es el momento en que estas solo de verdad, es el momento que tenes para encontrarte contigo, pensar en tus sueños, analizarlos y descubrir realmente que es lo que estas buscando, y de nuevo te responde el viento…paz!, cuenta la leyenda que el que prueba el fruto de El Calafate, vuelve por mas…y les puedo asegurar que es así.